arquitecto teodoro gonzález de león

Teodoro González de León, arquitecto mexicano que creó estructuras modernistas inspiradas en las antiguas ciudades de Mesoamérica, falleció el 16 de septiembre en Ciudad de México a la edad de 90 años.

González de León afirmaba que el principal objetivo de la arquitectura es crear productos útiles. "Hacemos cosas prácticas para que la ciudad las disfrute, pero también hacemos cosas que nos emocionan".

Nació en Ciudad de México en 1926, asistió a la Escuela Nacional de Arquitectura, donde él y dos de sus compañeros ganaron un concurso para diseñar el nuevo campus de la institución.

Biografía

A lo largo de siete décadas, González de León compartió su visión con museos, edificios gubernamentales, instituciones académicas y complejos de oficinas.

La monumentalidad de muchos de sus edificios recuerda a las pirámides y plataformas de las antiguas ciudades mesoamericanas, así como a los enormes palacios y catedrales de los invasores españoles.

Al mismo tiempo, el arquitecto González de León reinterpreto los principios del Modernismo en un entorno mexicano como parte de una generación de arquitectos latinoamericanos influidos por el maestro suizo-francés conocido como Le Corbusier.

A través de una serie de espacios abiertos en varios niveles, los visitantes se ven atraídos por sus luminosas estructuras públicas de hormigón visto, martillado o tallado para asemejarse a la roca volcánica de México. A pesar de su enorme volumen, el resultado hace que sus estructuras perezcan más manejables.

González de León ingresó en el Colegio de México en 1988, tras haber sido académico de número de la Academia de Artes desde 1984. Fue académico emérito de la Academia Nacional de Arquitectura y miembro honorario de la Academia Internacional de Arquitectura (AIA). También fue honorario causa por la UNAM.

Según el ensayo del Sr. González de León de 1985, el patio que procede tanto de la arquitectura prehispánica como de la colonial es "una constante en los edificios que hemos diseñado". A los patios, sin embargo, siempre se les ha dado una finalidad similar a la tradicional y no como espacio en blanco destinado a la contemplación.

La obra para El Colegio de México, una modesta universidad de humanidades que creó con su socio habitual, es la empresa que muchos consideran su cumbre.

Obras más Importantes

Estas son solo algunas muestras del acervo arquitectónico del arquitecto, que merece ser reconocido y valorado por todos los mexicanos. Su obra es un testimonio de su talento, su pasión y su compromiso con la arquitectura y con México. Gracias, maestro Teodoro González de León, por su legado invaluable.

Torre Arcos Bosques I "El pantalón"

Edificio Torre Arcos Bosques I
Edificio Torre Arcos I

Un rascacielos llamado Torre Arcos Bosques I se encuentra en la Ciudad de México, en Paseo de los Tamarindos. Hasta 2007, cuando comenzó la construcción de numerosos edificios más altos, fue el cuarto rascacielos más alto de Ciudad de México cuando se terminó.

Teodoro González de León (1926-2016), J. Francisco Serrano (1937) y Carlos Tejeda (1947-2006) son tres arquitectos mexicanos que trabajaron en el proyecto. A esta estructura se la conoce informalmente como "El Pantalón".

Como la torre está dotada del Building Management System, un sistema inteligente que gestiona todas las instalaciones y equipos de forma armoniosa y eficaz para salvaguardar la vida humana de los inquilinos cabe destacar que fue el primer edificio inteligente de América Latina.

Este sistema integra la iluminación del edificio, así como los sistemas eléctricos, hidrosanitario, de ascensores y de prevención de incendios.

Teodoro González de León pudo terminar un grupo de estructuras que se habían iniciado 20 años antes, en 1992.

Fondo de Cultura Económica

Edificio Fondo de Cultura Económica
Edificio Fondo de cultura económica

El proyecto del Fondo de Cultura Económica se compone esencialmente de tres unidades independientes, cada una con una función distinta.

González también construyó el puente de conexión que se encuentra frente a la estructura principal en 1995.

Hay que destacar que el arquitecto optó por desarrollar una estructura metálica triangular en la parte superior del edificio para darle ligereza.

La forma circular de la escalera principal recuerda a la escalera de Bramante de los Jardines Vaticanos de Roma.

El objetivo primordial de este proyecto es dar a la fachada principal del edificio un aspecto flexible y plástico a la vista del espectador.

Lo curioso es que el diseñador, como es habitual, optó por ocultar esta característica esencial bajo una forma escultórica curvada y expertamente realizada. Esta enorme estructura casi parece intentar volar.

Sus formas plásticas son finas, macizas, fuertes y extremadamente creativas. Las formas cóncavas y convexas se combinan en la plaza delantera y en la elevación general del edificio para crear una impresionante sensación de elegancia arquitectónica en toda la estructura.

El profundo respeto de González por el medio ambiente es un último aspecto digno de mención. El diseño abraza meticulosamente las rocas volcánicas presentes en la zona situada detrás de la estructura, como si quisiera agarrarlas y aceptarlas de verdad.

El Colegio de México

Interior del Colegio de México
Interior del Colegio de México

Abraham Zabludovsky y Teodoro González de León, dos arquitectos mexicanos, crearon el Colegio de México, una representación precisa de la arquitectura brutalista del México de los años setenta. El Colegio de México, una de las instituciones de enseñanza de posgrado más antiguas de México, se construyó en 1976.

El difícil terreno de la escuela, en el cruce de dos importantes carreteras de Ciudad de México, supuso un reto importante durante el diseño y la construcción.

Al estar situado en las laderas del cerro del Ajusco, cubiertas por la lava del Xitle hace miles de años, la topografía es sumamente accidentada, por lo que los arquitectos buscaron la forma de adaptarse al paisaje.

Una forma trapezoidal sirvió de base al complejo, con el lado más pequeño orientado al norte, donde se encuentran los límites y donde se sitúan las secciones de servicio.

Contar con un aislamiento adecuado para el correcto desarrollo de las actividades de docencia e investigación fue uno de los prerrequisitos planteados para el Colegio de México. Además, la distribución de las instalaciones debía permitir y promover el contacto entre quienes trabajaban en distintos campos académicos y empleos.

Los centros de estudio se construyeron en dos niveles con entrepisos, donde se ubican las habitaciones privadas de los investigadores, y espacios interiores de doble altura que reciben iluminación central, ya que decidieron que los centros de estudio se ubicaron alrededor del nivel superior del patio, por encima de los seminarios y la biblioteca.

Los patios cubiertos se incorporaron al interior como puntos focales de las actividades en torno a las que se estructura el complejo, fusionando el edificio y el exterior.

Aproximadamente un tercio de la superficie total del edificio lo ocupa la zona de la biblioteca. La biblioteca es un rectángulo de tres plantas con una longitud máxima de 30 metros. Su diseño permite la distribución más lógica de sus componentes, y su posición es la mejor en este tipo de terreno.

Torre Arcos II

Edificio torre arcos II
Torre Arcos II

El segundo rascacielos del complejo Arcos Bosques Corporativo, Torre Arcos II, tiene 161,2 metros de altura y un diseño arquitectónico posmodernista con dos torres paralelas de 34 plantas cada una conectadas por un dintel de 2 pisos en el centro.

Hormigón armado, vidrio, mármol blanco y aluminio fueron algunos de los materiales necesarios durante su construcción, que comenzó en 2005 y finalizó en marzo de 2008. Fue creado por GICSA.

Al igual que la Torre Arcos I, las fachadas de la torre están compuestas por muros blancos con cristal tintado de verde y mármol blanco, a excepción de la cara sur, que está totalmente cubierta de cristal verde.

Esta estructura contemporánea está destinada a oficinas y cuenta con un aparcamiento con capacidad para 3.300 coches. Cada torre tiene un helipuerto en la parte superior. Desde su construcción, la estructura se ha consolidado como símbolo de la arquitectura mexicana contemporánea en Ciudad de México.

Museo Rufino Tamayo

Fachada del museo tamayo
Museo Tamayo

En la primera zona del Bosque de Chapultepec se encuentra el Museo Tamayo. Rufino Tamayo siempre había deseado que su colección de arte se ubicara en esta región crucial para la calidad de vida de Ciudad de México.

La administración municipal autorizó la cesión de una parte de los terrenos del Bosque, donde se encontraba el campo de golf Azteca. En ese momento, el artista se puso en contacto con Abraham Zabludovsky y Teodoro González de León, para crear la estructura que más tarde se añadiría a la colección.

Los arquitectos llevaron a cabo una minuciosa investigación que incluyó, entre otras cosas, viajes a numerosos museos de todo el mundo. La construcción comenzó en 1979 y finalizó dos años después, en 1981, tras la fase de diseño iniciada en 1972.

El producto final fue una estructura que valió a González de León y Zabludovsky el Premio Nacional de Ciencias y Artes 1982 en la categoría de "Bellas Artes" tanto por la singularidad de su diseño como por las soluciones plásticas y funcionales que incorpora.

El edificio, que es uno de los pocos ejemplos de arquitectura moderna en México concebido desde el principio para uso museístico, está bellamente integrado en su entorno gracias a su forma piramidal, que alude a la tradición arquitectónica prehispánica.

Museo Universitario de Arte Contemporáneo

Museo Universitario de Arte Contemporáneo
Museo Universitario de Arte Contemporáneo

El primer museo creado específicamente para el arte contemporáneo en México es el Museo Universitario de Arte Contemporáneo de la UNAM.

La idea del arquitecto mexicano Teodoro González de León fue elegida en un concurso convocado por el consejo universitario en 2004 para la realización del museo.

El museo se inauguró el 27 de noviembre de 2008 y su construcción comenzó en 2006. Desde entonces, el MUAC ha adquirido y expuesto algunas de las obras de arte más significativas jamás creadas.

La estructura diseñada por Teodoro González de León, creada en colaboración con un equipo multidisciplinar, ofrece un foro para la experimentación crítica y el debate animado en el que el visitante es el eje central de los estudios museísticos.

La ubicación del museo, el Centro Cultural, distribuye sus volúmenes según su orientación. El módulo roto de la Sala de Conciertos está acompañado al este por un volumen curvo, mientras que los volúmenes blancos del Museo con diferentes alturas están al oeste del enorme pórtico inclinado y acristalado que da a la plaza.

La arquitectura mexicana tiene en Teodoro González de León a uno de sus máximos exponentes y orgullos. Su obra, que abarca más de seis décadas, ha dejado una huella imborrable en el paisaje urbano y cultural de nuestro país, así como en el reconocimiento internacional de nuestra identidad.